Amanece, ella también
Mirada de niña extraviada
su cuerpo dolorido
la bola que gira loca no es su mundo
En el día
cansada lleva su alma
La vida le pesa
La vida le pasó por encima
La vida es una extraña
Su caminar es lento, arrastrado
Con alas rápidas
los años aterrizaron de golpe
avasallaron su cuerpo
envejecieron su espíritu
amores que fueron, ya no son
En su crujiente gemido agigantado
mira al cielo y espera
espera, que se apague la luz