Hace años que se encuentra muy perdida,
vendados le miramos
esos ojos,
aplica la ley, como sus antojos,
figura tristemente enrarecida.
Está creando grandes
los enojos
Balanza... ¡qué
torpeza va torcida!
pesada es la moneda de la vida,
sus manos, nos mostraron tintes rojos.
Inclina su justicia
por dinero.
El pobre no es
culpable de pobreza,
culpable será el falso caballero.
Sufriendo de hambre el pobre, solo reza,
trabaja por un sueldo de chiquero,
al rico le aprovecha su torpeza.
Tú sigues con los ojos tan vendados,
no puedes entender de la riqueza
que tienen, esos puños apretados.
