Mi momento en el mundo.

lunes, 12 de agosto de 2013

MIS HIJOS

Nueve lunas de esperanza
de ilusión y de alegría,
acariciando la panza
en donde los escondía.

Y los vi por vez primera
indefensos, ¡tan pequeños!
con ojos  verde pradera,
perfectos, como en mis sueños.

Los quise con egoísmo
del que no les hace daños,
 fui cayendo al abismo,
al del paso de los años.

Sin darme cuenta siquiera
que se hicieron bellos seres,
 las joyas de mi alhajera,
la lana de mis tejeres.

Hoy ya me tocan  los nietos
el alma y el corazón.
Cuando me abrazan inquietos
se me cae la armazón

Armazón que fue cubriendo,
el dolor de ver de lejos,
mis hijos que van viviendo
lo que vivieron sus viejos.