De tropezar aprendí, a no hablar a no decir,
Pues sin querer ofendí, sin querer llegué a herir
Solo si piden consejo, daré mi humilde opinión,
no para que cumplan con todo, solo para mostrar una opción.
No pregunten que me pasa, no cuestionen mi callar,
yo ya levanté la casa y la voy a amurallar.
Ustedes son vida nueva, eligen como hay que actuar,
no me pidan, no pregunten, no los quiero equivocar.
Si ayer a mis labios callaron, con muy creída razón,
hoy ellos ya se cerraron pues aprendí la lección,
Que no les sirven mis golpes que mis piedras no son suyas,
que les molestan mis voces, hoy han sacado las uñas.
No pregunten que me pasa, no tengo ningún problema,
mi razón es muy escasa, se me acabaron los temas.
Solo sabrán algún día cuando ya no tenga venas
Que mi sangre hubiera dado si les quitara sus penas.
No pregunten que me pasa, no tengo ningún problema,
Solos levanten su casa, sin mi voz, ahora es mi lema.
No pregunten que me pasa, porque ya no quiero hablar,
sobradas tengo razones para llamarme a callar.
No pregunten que me pasa porque ya no quiero hablar,
con mi voz tan destemplada no los quiero molestar.
No pregunten que me pasa, como espuma de la mar,
De tanto andar por la vida, hoy me tiro a descansar.
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