TRABAJAR, TRABAJAR

Se levantó muy temprano

todas las mañanas igual

es su ritmo de artesano

trabajar, trabajar, trabajar

Doce horas que pasa sentado

para ganar su salario

tiene tiempo en sus tareas

de almacenar mil ideas.

Al final de su jornada

sale al sol que lo lastima

mira para un costado

saluda a su vecina.

Le duelen ya sus raíces

su tronco se va torciendo

la vista la fue perdiendo

como sus días felices.

Trabajar, trabajar, trabajar

no sabe si está viviendo

no sabe si está muriendo

o tan solo su vida

la pasa sobreviviendo.

Entró el alma a aborrajar

así lo siente en su mente

trabajar, trabajar, trabajar

secarse, morirse, demente.

Búsqueda...

En la larga oscuridad del día

voy a levantar vuelo del abismo

negro, profundo en que me encuentro

pasaré sobre crestas de las olas

me llenarán de gotas de esperanza.

Surgiré de las sombras buscando luz.

En las profundidades insondables

enterraré los grises apagados

para que revivan iluminados

por los colores de las ilusiones.

Como un cataclismo me inundará

el rayo artero de la claridad.

El sabor a hiel desaparecerá

arrastrado por la clara tempestad.

Desde lo más profundo del averno

intenté con furia levantar vuelo

mas sus fauces se cerraron ante mí

nuevamente en su noche me sumí.

Mirar atrás

Llegó a su vejez, conoció la desesperanza

se preguntó si había algo más por hacer.

Envejeció más por querer que por deber

Odió quedarse sola en la añoranza

Quería saber si le faltó algo por decir

Si todo lo hecho era por lo que nació

se cuestionó los errores que no pudo corregir

si lo que quería, fue para lo que vivió

si lo sentido bastó o tuvo más por sentir

Acaso ¿Lo que anida en su mente existió?

o solo es una fábula añorada de su imaginación

¿No será que tan solo en este viaje sobrevivió?

Miró tras de sí para encontrar una huella

buscó alguna marca que dijera que por ahí pasó

vio que había algo en el mundo dejado por ella

¿Por qué será ese sentimiento de que fracasó?

Un desasosiego la invadió, mirar atrás no basta

cuando en el espejo no hay nada para ver.

Quizá vendió su alma en la subasta

siendo aquello que nunca fue su sueño ser.