Hay días que al levantarnos de la cama ya salimos con el pie izquierdo, como hoy para mí.... Comenzó el otoño, ya tuvimos el primer día maravillosamente gris y lloroso...eso hasta ahí nada mal...el tema fué cuando como siempre mientras trabajo (sino no se come...como les pasa a todos) a su vez me puse a hacer la comida del almuerzo....corría a seguir con el trabajo y corría hasta la cocina para ver como estaba la cacerola, hasta que claro en todo no se puede y me entusiasmé trabajando y cuando sentí olorcito leve a quemado, una parte...ya se había quemado....algo salvé...comer, comí....después de comer y limpiar la cocina dejando todo en su respectivo orden, intenté desagotar la piscina pués ya en otoño no hace falta tenerla al tope para gastar en productos para mantener el agua.... ¿Que me pudo haber pasado...? no funcionaba la bomba de desagote....me tomé todo el frío y el agua de la lluvia en el intento de hacerla funcionar...cuando ya cansada de fracasar en las pruebas decido dejar todo para otro día, suena el teléfono, atiendo y es mi hijo que me pregunta si había tenido hepatitis cuando era niño y a que edad, pues quería donar sangre pero no sabía si podía...su sangre es negativa difícil de conseguir y me contó la historia de para quien era...la esposa de un compañero de trabajo acaba de quedar embarazada, su primer hijo....con los análisis de rutina se le descubre que tiene Leucemia...Una muchacha joven...con ilusiones de tener su primer bebé...entonces...me miré al espejo enojada conmigo misma y me pregunté -¿De que diablos te quejaste hoy, todo el día...?-
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