Los tiempos de la vida son difíciles de
comprender, en los primeros años, el tiempo no pasa, las horas son lentas,
queremos crecer, ser "grandes", el camino para llegar nos parece muy
largo, luego desde los dieciocho a los cuarenta y tantos, el tiempo se nos hace
real, la primavera llega en el tiempo justo y termina cuando el verano
arremete, todo el tiempo es real, pero de ahí en adelante se acelera, ayer
sacamos la ropa de verano y rápido se nos viene el tiempo de guardarla, para sacar la de otoño. Entonces nos damos cuenta que
el tiempo ya no es real, que se nos escapa a la carrera. Hace muy poco que
festejamos el fin de año y no sabemos como, ya estamos haciendo las compras
para despedir este año.
Sí señor, se nos acelera el tiempo, y por acelerado se nos escapa, no podemos detenerlo, solo podemos ambicionar, que nos permita decir Te Amo y Hasta Pronto...
Sí señor, se nos acelera el tiempo, y por acelerado se nos escapa, no podemos detenerlo, solo podemos ambicionar, que nos permita decir Te Amo y Hasta Pronto...